A medida que crecen las ciudades y aumentan los desafíos medioambientales, la gestión eficaz de las aguas residuales es cada vez más vital. Las empresas de servicios públicos deben sortear el envejecimiento de la infraestructura, las normativas más estrictas y los efectos del cambio climático, al tiempo que garantizan el buen funcionamiento de sus sistemas de alcantarillado. En este panorama en evolución, la innovación tecnológica desempeña un papel crucial.
Descubra cómo las tecnologías avanzadas de BlueEdge™ están mejorando la eficiencia y la resiliencia de los sistemas de alcantarillado y los procesos de tratamiento, ayudando a las empresas de servicios públicos a hacer frente a los desafíos planteados por la urbanización y el cambio climático.
Tecnologías de gestión de las aguas residuales
Uno de los mayores desafíos en la gestión de las aguas residuales es mantener la integridad de los sistemas de alcantarillado al tiempo que se evitan rebosaderos costosos. Herramientas avanzadas como los dispositivos inteligentes de monitoreo de aguas residuales y los sensores de presión externos, permiten a las empresas de servicios públicos monitorear las condiciones de las alcantarillas en tiempo real. Esta capacidad permite la detección precoz de problemas, facilitando respuestas rápidas que minimizan los daños y ayudan a evitar infracciones de la normativa.
Yorkshire Water ha adoptado el sistema SeptiNet, una tecnología pionera de sensores inteligentes que monitorea y controla la septicidad en su red de aguas residuales. Este sistema utiliza sensores de gas H2S y ORP para proporcionar datos continuos en tiempo real, lo que ayuda a los operarios a identificar los primeros signos de septicidad y permite adoptar medidas proactivas como la dosificación de productos químicos o el desvío del caudal. Al aprovechar esta tecnología, Yorkshire Water reduce los olores, la corrosión y la contaminación, al tiempo que mejora la resiliencia y la eficacia de sus sistemas de aguas residuales.
Del mismo modo, Anglian Water instaló monitores Syrinix PIPEMINDER-ONE en todas sus tuberías de impulsión para detectar rupturas y optimizar el rendimiento. Los datos de estos monitores, procesados a través de la plataforma de datos de gestión de la presión RADAR, permiten detectar rápidamente las caídas de presión, lo que conlleva una mitigación más rápida y una reducción del impacto medioambiental. El sistema también identifica ineficiencias en el rendimiento, como válvulas bloqueadas, lo que se traduce en un importante ahorro de energía y una mayor vida útil de los activos, con una amortización de la inversión prevista en un año.
A pesar de los desafíos que plantean el envejecimiento de la infraestructura, la urbanización y el cambio climático, estas tecnologías ofrecen a las empresas de servicios públicos una forma fiable de adelantarse a los posibles problemas y proteger a las comunidades.
Tecnologías de control de la aireación
Además de monitorear las alcantarillas, el control de la aireación desempeña un papel vital en el tratamiento de las aguas residuales. La aireación ayuda a descomponer la materia orgánica, pero es un proceso que consume mucha energía. Existen soluciones avanzadas que optimizan este proceso permitiendo a los operarios ajustar los niveles de oxígeno con mayor precisión. Esto no solo mejora la eficacia del tratamiento sino que también reduce significativamente el consumo de energía, haciendo que el proceso sea más rentable y respetuoso con el medio ambiente. Utilizando estas herramientas, las instalaciones de aguas residuales pueden afrontar el desafío de equilibrar la demanda energética con la necesidad de un tratamiento eficaz.
En la planta de recuperación de recursos hídricos J.D. Phillips de Colorado Springs se actualizaron los sensores de calidad del agua Badger Meter para mejorar el control de la aireación monitoreando parámetros clave como NH4-N, pH, oxígeno disuelto, SST y NO3-N. Al utilizar radios RS485 Modbus para la transmisión de datos en tiempo real en lugar de costosas instalaciones de conductos, la planta consiguió la movilidad dinámica de los sensores por las cuencas de aireación, lo que permitió una gestión más eficaz de las soplantes de aireación y se tradujo en una reducción de costos operativos.
Tecnologías de control de procesos
Otra área crítica en el tratamiento de aguas residuales es el control de procesos, que garantiza la calidad constante del tratamiento y la eficacia operativa. Los sistemas automatizados y las soluciones de flujo permiten monitorear y ajustar los parámetros de tratamiento en tiempo real. Estos sistemas permiten a las instalaciones cumplir las normas reglamentarias al tiempo que mejoran el rendimiento general. En un terreno en el que los sistemas son complejos y la calidad de las aguas residuales puede variar, tener la capacidad de automatizar y racionalizar las operaciones es esencial para lograr eficacia y fiabilidad.
En El Gouna, Egipto, los investigadores están evaluando métodos para ampliar la capacidad de la planta central de tratamiento de aguas residuales, sin nuevas construcciones, comparando los lodos activados convencionales con procesos híbridos de soporte de biopelículas de lecho fijo y móvil. Utilizan soluciones de BlueEdge, incluidos el spectro::lyser, el ammo::lyser y el oxi::lyser, para medir parámetros clave y optimizar la eliminación de DQO y la nitrificación, con el objetivo de evaluar los portadores de biopelículas como una mejora viable para plantas sobrecargadas.
Tecnologías de gestión de lodos
La gestión eficaz de los lodos es igualmente importante para mantener un funcionamiento sin problemas. Los mantos de lodos deben monitorearse cuidadosamente para evitar el arrastre, que puede interrumpir el proceso de tratamiento y provocar mayores costos de mantenimiento. Las soluciones de monitoreo en tiempo real ayudan a las instalaciones a mantener el control de los niveles de lodos, evitando estos problemas y mejorando el rendimiento. Además, el control de los sólidos en suspensión totales (SST) es fundamental para garantizar la calidad del agua. Las herramientas avanzadas de monitoreo, como el monitor de sólidos en suspensión Q46/88, optimizan la gestión de los SST y mejoran aún más la eficacia de las operaciones de tratamiento.
La planta de tratamiento de aguas de Punta Gorda, en Florida, implantó los monitores de calidad del agua FilterSmart y EchoSmart para mejorar sus procesos de filtración y gestión de lodos, lo que se tradujo en una importante eficacia operativa. Al optimizar los tiempos de funcionamiento de los filtros y reducir la duración de los retrolavados, la planta consiguió un ahorro anual de aproximadamente $86,000 dólares, mientras que la mejora del control de los lodos supuso un mayor ahorro en los procesos de secado, lo que en total supuso un ahorro de más de $500,000 en los primeros años de la instalación.
Reflexiones finales
El futuro del tratamiento de aguas residuales pasa por abrazar la innovación. Con las demandas crecientes sobre infraestructuras anticuadas y las presiones cada vez mayores de la urbanización y el cambio climático, la tecnología inteligente es más importante que nunca. La cartera de soluciones BlueEdge está diseñada para hacer frente a estos desafíos al mejorar la eficiencia, reducir el consumo de energía y garantizar el cumplimiento de la normativa. Mediante la integración de estas tecnologías, las instalaciones de aguas residuales pueden construir un sistema más resiliente y sostenible que está mejor equipado para hacer frente a las demandas de hoy y de mañana.
