Carbono orgánico asimilable (COA)

El carbono orgánico asimilable (COA) es fundamental en la evaluación de la calidad del agua, ya que indica el potencial de crecimiento microbiano y la estabilidad biológica de los suministros de agua. Unos niveles elevados de COA pueden provocar la proliferación microbiana, la formación de biopelículas y comprometer la calidad del agua, lo que supone un reto para las empresas de servicios públicos de agua potable. El monitoreo de las concentraciones de COA permite intervenir a tiempo para controlar los riesgos microbianos y optimizar los procesos de tratamiento.

Nuestras soluciones avanzadas de monitoreo proporcionan datos en tiempo real sobre los niveles de COA, facilitando estrategias de gestión proactivas para garantizar el cumplimiento de la calidad del agua. La integración con los sistemas de control permite respuestas automatizadas a los cambios en los niveles de COA, mejorando la eficacia operativa y la protección de la salud pública. El cumplimiento de las normas reguladoras de los niveles de COA es esencial para mantener la confianza en la calidad y la seguridad del agua. Al dar prioridad al monitoreo de COA, las empresas de servicios públicos de agua pueden mitigar los problemas relacionados con los microbios y suministrar agua potable segura y fiable a las comunidades.